Cuando tenía un acto a primera hora, me hacían el moño de picaporte por la noche, y me tocaba dormir casi con la cabeza puesta en la mesilla de noche.
Nació en la pedanía murciana de Puente Tocinos, y al igual que toda su familia se integró en la Peña Huertana La Crilla, donde participa y disfruta de las vivencias que les transmiten otros socios mayores que ella sobre las tradiciones y costumbres de la huerta, que va muriendo poco a poco. Ha tenido el privilegio, como madrina de la misma peña huertana, y como reina infantil de la huerta 2008, de cortar la cinta de inauguración de la sede social de La Crilla, después de treinta años de historia de esta asociación. Ahora cede la corona de azahar a su sucesora, Carmen Pérez, de la Peña Huertana El Jamón.
-Debo confesarle que me es difícil hacer una entrevista a una niña de diez años de edad, que a su vez ha sido reina infantil de la huerta, y según tengo entendido, con muchas vivencias tanto en la peña huertana que le propuso como candidata, y también durante todo tu reinado...
-Tú no tengas miedo. Yo también estoy un poco nerviosilla, pero después de tanto tratar con otras personas de mi edad y con adultos que son jefes, alcaldes y presidentes de muchos lugares, ya tengo bastante desparpajo.
-¡Así me gusta!, Tengo muchas curiosidades en torno a una reina huertana; por ejemplo, ¿son de plástico las flores que siempre lleváis en la cabeza?
- (Ríe a carcajadas). Ni mucho menos, antes sí podías utilizarlas pero la Federación de Peñas Huertanas lo ha prohibido; y no tienen porqué ser siempre flores de azahar, sino que cualquier flor que sea natural y esté fresca vale. A mí a veces me han puesto unos ramilletes muy raros, pero de muchos colores.
-Pues imagino que también desprenderían olores raros; ¿qué aroma de las flores que te han colocado a la cabeza te ha gustado más?
-No sé, no podría explicártelo, pero cuando me hice el reportaje de fotografías después de salir elegida reina, aquellas flores tenían un aroma especial que nunca olvidaré.
-En cuestión del moño de picaporate imagino que siempre es más fácil llevar uno en el bolsillo, para podértelo poner y quitar cuando te sea preciso.
-(Vuelve a reír a carcajadas) En mi caso nunca me he puesto el moño artificial; siempre me lo ha preparado Angelita, la peluquera de nuestra Peña Huertana La Crilla y ten en cuenta que para hacer un buen trabajo siempre necesitaba una hora u hora y media, pero a mí no me importaba, siempre ha sido mi pelo el que he lucido.
-¿Cómo te las arreglabas cuando tenías que estar en un acto a primera hora de la mañana?
-Ya sabía yo que esa noche me tocaba dormir con la cabeza puesta casi en la mesilla, o al menos con mucho cuidado, pues me dejaban ya casi totalmente preparada la noche anterior.
-Lo que sí he comprobado es que cambiáis mucho de refajos, tendrás un armario para ti sola.
-Refajos sí que tengo, el primero me lo hicieron cuando tenía dos años de edad y me llevaban mis padres, Antonio y María, en la silleta. Ahora mismo tengo en total ocho refajos, y algunos mira que pesan.
-¿En qué momento has pasado más nervios durante todo tu reinado?
-Cuando iba en lo alto de la carroza el día del Bando; veía a la gente como si fuesen hormigas, y temía que se volcase, pero al rato me di cuenta que iba bien segura.
-¿Cómo te sientes ahora?
-Un poco triste porque me voy, pero así es todo en la vida. De nuestra peña prácticamente todos los años han salido damas de honor, también reinas mayores, y yo soy la tercera reina infantil que sale de esta peña.
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